Iñigo Martínez
Celebrado en Bilbao el día 1 de julio de 2022
Organizada conjuntamente por la Asociación de Profesionales de Salud Mental Comunitaria OME EUSKADI y la Antena Clínica de Bilbao
El 1 de julio de este año 2022 disfrutamos de una animada, interesante y compleja mesa redonda en el Hik Ateneo de Bilbao, bajo el título “Polarización del mundo, fenómenos de amor, odio y segregación”. En la mesa participaron Iñaki Marquez (psiquiatra, terapeuta, miembro de OME-AEN, director de «Norte de salud mental), Tere Maldonado (profesora de filosofía, escritora y miembro del grupo Feministalde), Ander Retolaza (psiquiatra y escritor) y Oscar Ventura (psicoanalista en Alicante, miembro del consejo de la AMP- Asociación Mundial de Psicoanálisis y AME Analista Miembro de la ELP y la AMP.
Recojo un breve apunte en torno a las intervenciones de los ponentes desde el significante “polarización”; una palabra que circula en el discurso contemporáneo y que es interesante interrogar para situar la época. Es un término que habitualmente se relaciona con las redes sociales, las burbujas digitales, las cajas de resonancia.
Iñaki Marquez se lamentó de que esta época de cambios abruptos, con guerras, militarismo en auge, violencias, neofascismos, crisis económica y social, pandemias, posibilidad de una 3ª G.M… no generan reacción ni oposición. Desde su punto de vista, nos adecuamos a todos esos cambios con demasiada facilidad. Entonces, más que de polarización tal vez deberíamos hablar de adormecimiento social.
Teresa Maldonado cuestionó cierta tendencia general a entender la polarización como algo negativo, radical, de posiciones extremistas. Pareciera que lo moderado, la búsqueda de términos medios sería lo ideal. ¿Es así? Una posición decida, por ejemplo, en contra de la guerra, tal vez no admite medias tintas. Por otro lado, la polarización actual está centrada sobre todo en torno a la política de las identidades: no se polariza en torno al modelo económico, que parece totalmente homogéneo e incuestionable.
Ander Retolaza planteó en su intervención cierta polarización en consideración a la terapia y a la figura del terapeuta, idealizada y denigrada, en función de las características del paciente y de su demanda. La demanda de felicidad actual esconde su otro polo: el creciente malestar en el ya muy decaído estado de Bienestar.
Oscar Ventura relanzó la pregunta por el sintagma polarización del mundo: ¿es algo que describe la lógica del lazo social hoy? No es tan seguro que habitamos un mundo polarizado, por lo menos en el registro en que conocimos la polarización del mundo durante el siglo XX. Más bien planteó que se ha producido un estallido de la polarización y que estamos ante un mundo mucho más atomizado y fragmentado.
En la conversación con la sala se retomaron muchas ideas de las planteadas por los ponentes. Tomó el alegato de Teresa Maldonado en favor del humanismo. No se trata de prohibir el odio, pasión humana imposible de suprimir; tampoco se trata del mandato de amor al prójimo, sino de crear y mantener ciertas condiciones políticas que garanticen una vida digna. Concluyó con la pregunta de Oscar Ventura: ¿cómo conjugar el humanismo con la pulsión de muerte que habita en cada uno de nosotros? Es una pregunta que tal vez toca responder uno por uno.